Igual que La Faraona revolucionó
la copla en los años 50 bajo la máxima de “No canta ni baila pero no se la
pierdan” (perdón a los millennials, postmillennials y centennials por la
referencia viejuna) , hay una suerte de nuevos formatos que han llegado para romper
los códigos de radio y televisión convencionales. No son solo tele, no son solo
radio, ¿es el futuro de la tele y de la radio?
Las nuevas tecnologías, el uso de
redes sociales, la tv a través de internet y la evolución de las plataformas de
televisión, son algunos de los factores que han propiciado un evidente cambio
en los hábitos de consumo televisivo y que hayan surgido nuevos formatos que son
un híbrido de espacio radiofónico, programa de tele y vídeo de youtuber.
La Vida Moderna y Yu No Te PierdasNada, son dos claros ejemplos de estos nuevos formatos que buscan atrapar al
target más joven, en muchos casos nativos digitales que, desde hace años, han
mostrado su desafección con la radio y la televisión convencionales hasta
prácticamente desaparecer en los datos de audiencia.
Se trata de programas que
plantean nuevas normas del juego en cuanto a los contenidos, el desarrollo y
las formas de consumo. Partimos de la base de un programa de radio que se retransmite
o se graba con una realización básica de televisión, teniendo siempre presente
y adaptando los contenidos tanto para oyentes como para telespectadores. Tanto La
Vida Moderna como Yu No Te Pierdas Nada son conducidos por David Broncano (@davidbroncano) y
Dani Mateo (@DaniMateoAgain) respectivamente, dos rostros más que reconocibles de la televisión
convencional, lo que amplía el rango de audiencia potencial.
Algunas claves del éxito de estos
formatos son: el ritmo, lo más dinámico posible; el tono del discurso, extremadamente
distendido; la provocación y el humor irreverente como hilo conductor; y el
reducido número de cámaras que lo acercan estéticamente a las piezas que triunfan
en internet dentro del target más joven.
Son productos muy flexibles tanto
en sus contenidos como en las posibilidades de consumo. Se puede acceder a
ellos a través de la emisión lineal de radio, podcast, la página web del grupo
mediático al que pertenecen (donde se puede ver completo o segmentado) o sus
respectivos canales de Youtube (La Vida Moderna, Yu No Te Pierdas Nada).
Programas que se pueden ver/escuchar a la carta en el momento en el que el receptor
considere más oportuno.
Otra característica de este tipo
de producciones es que cuenta con un público muy fiel, que comparte expresiones,
bromas internas, guiños, un imaginario colectivo que ha llegado a convertirse
en una nación ficticia como Moderdonia bajo cuyo paraguas se protege una masa
de entregados y fieles seguidores que sufren y celebran la fundación,
disolución y refundación de Moderdonia a capricho de David Broncano , Quequé (@_Queque_) e
Ignatius Farray (@IgnatiusFarray), los directores de orquesta de La Vida Moderna.
Programas que se diseñan como si
se tratase de un software de código abierto en la que casi todo cabe, casi todo
puede pasar, y quizá este sea el gran secreto de su éxito para sorprender y
enganchar al target más inconformista de la audiencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario